Programación Académica

Orígenes
Objetivos
Planta Profesoral

Perfil Institucional y Conceptual

El Programa de Perfeccionamiento y Actualización Docente, PPAD, es una instancia académica, adscrita al Departamento de Administración Educacional de la Escuela de Educación de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad de Los Andes; ella se inspira en una concepción autonómica de la academia, funciona de manera autogestionaria y prospectiva y es la oficina universitaria encargada de planificar, desarrollar y evaluar políticas y planes de educación permanente dirigidas a la atención inmediata, mejoramiento continuo y desarrollo integral del magisterio merideño y de la región andina.

Once años de andanzas ininterrumpidas ofreciendo sus espacios para el trabajo de educación permanente han permitido al PPAD fortalecer su visión universitaria del proceso educativo a través de la discusión a la que invitan las nuevas concepciones del currículo y del aprendizaje, así como del debate que proporciona un mundo altamente complejo y altamente dependiente y globalizado por las tecnologías de la información y las variantes económicas de un neoliberalismo que, al parecer, tienden a unificar las visiones de la realidad frente a otras alternativas del pensamiento social y político cada vez menos competitivos.

Desde nuestros espacios académicos de reflexión y práctica pedagógica, ubicados en la Universidad o fuera de ella, hemos renunciado a ofrecer un programa de educación continua o permanente basado en un discurso y una práctica reproductiva de saberes percibidos, pensados, dichos o escritos por otros.

La concepción que genera direccionalidad a la reflexión, a la propuesta y a la praxis de nuestros cursos, talleres o seminarios de actualización docente, coloca al maestro o docente participante en un plano de ser él quien se convierta en un gran constructor de su autoformación, en sintonía con las exigencias personales y requerimientos profesionales del ejercicio de la docencia, así como de la visión integral que ha de tener del alumno, visto este en las dimensiones cambiantes y dinámicas del niño, púber o adolescente.

En este sentido, estamos convencidos de que nadie aprende del otro si no media una relación de compromisos personales y pedagógicos y de una gran correspondencia comunicacional. El conocimiento no se produce si previamente no existe una disposición afectiva, intelectual y volitiva para construirlo.

 

Programa de Perfeccionamiento y Actualización Docente
Escuela de Educación. Facultad de Humanidades y Educación
Universidad de Los Andes, Mérida - Venezuela