Día de la República 2017
India ha conmemorado el 69 aniversario de la proclamación de su República. La Constitución de la República de la India entró en vigencia el 26 de enero de 1950. Transcurrieron dos años y casi un mes luego de haber logrado la independencia el 15 de agosto de 1947, para el logro de su Carta Magna donde se garantiza a todos sus ciudadanos la justicia, libertad e igualdad económica (incluyendo la de género). Llegar a casi siete décadas de este deber ser ha sido arduo y aun la deuda social pendiente genera retos y controversias en distintas realidades en India que siempre salen en evidencia cuando presenciamos injusticias en su pueblo.
El día de la República de la India este año se encuentra inmerso en un contexto heterogéneo de eventos y contrastes para 1.300 millones de habitantes que conforman el país. En la actualidad la fe en las instituciones democráticas que integran al Estado indio pasa por el tamiz de la eficiencia. La fraternidad, la dignidad y los derechos humanos del ciudadano indio de la ciudad o el campo pasan por los resultados prácticos de una justicia cuestionada, de la calidad de vida en una mayoría frente a los privilegios de elites que tienden a olvidar las profundas desigualdades sociales. En este sentido, la integridad de la nación, depende ampliamente del grado de equilibrio de políticas públicas multiinstitucionales que tengan efectos sustanciales en la población que anda a pie, en trenes, toma buses, taxis o riksas diariamente.
India no solo es un país inmenso en su geografía física, sino inmenso en su geografía humana, estamos conscientes plenamente de las proporciones del Indostán. Similarmente, sabemos que no todos los problemas se solventan en casi 70 años próximos a conmemorar de independencia. La consolidación nacional india se va tejiendo en la medida que el sistema democrático sea autocrítico resuelva problemas y oxigene decisoriamente el panorama gubernamental de turno cumpliendo cabalmente con el pueblo. En palabras recientes con motivo del 69 aniversario del día de la República el Honorable Señor Pranab Mukherjee, presidente de ese país, indicó: India posee un ingreso per cápita que se ha multiplicado por diez, el índice de pobreza ha disminuido en dos tercios, la esperanza de vida media se ha duplicado y la tasa de alfabetización se ha multiplicado por cuatro. Somos hoy el más rápido crecimiento entre las principales economías del mundo. Somos el segundo mayor reservorio de mano de obra científica y técnica, el tercer mayor ejército, el sexto miembro del club nuclear, el sexto miembro de la carrera por el espacio y la décima potencia industrial. De un país importador de granos netos de alimentos, la India es ahora un exportador líder de productos alimenticios. El viaje hasta ahora ha sido agitado, a veces doloroso, pero la mayoría de las veces, estimulante.
Efectivamente, el viaje nacional soberano que ha tenido el pueblo indio ha sido intenso y ello ya incide en una modernización avasallante que no perdona a nadie y a veces la compasión para aquellos que no tienen que comer ni un techo donde vivir, no viene de arriba sino del propio pueblo. La velocidad actual de crecimiento en las estadísticas mencionadas por el Presidente de la India, demandan ajustes en la economía para lograr el anhelado marco de “estabilización” del aparato productivo que posee y aspira India en el siglo XXI, dicha materia tiene polémicas de toda índole sin consenso nacional.
La educación, la ciencia y tecnología, la industria, los modos de vidas tradicionales de las amplias mayorías y el futurismo que se ha trazado en el mapa político y económico del gobierno del Primer Ministro Narendra Modi, igualmente implica de manera paralela un viaje en pleno desarrollo con acelerada velocidad que amerita contar con buenos frenos a la hora de una crisis de proporciones estructurales. La intensidad de cambios actuales que se vive al interior de la sociedad india, plantea mayor responsabilidad en el ejercicio del gobierno que ejecuta y decide por el “bienestar de todos”. India no debe ir apurado en alcanzar el desarrollo, sin sopesar las consecuencias de sus actos y alianzas internacionales. Es necesario concertar a todos los niveles para evitar un colapso.
La democracia es la democracia, ya los tiempos de los maharajas pasaron con una gloria de vergüenzas, ya que su opulencia nunca sopesó que esa riqueza era el resultado de millones de pobres. La democracia india a su interior es suma de tolerancias y respetos de pueblos que inmigraron al Indostán, luego coexistieron y emanaron en una sola nación, su espíritu democrático no puede ser sinónimo de intolerancias de mercados excluyentes para el indio común.
Más y mayor calidad democrática deber ser el futuro de la India.
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