La cuenca del Pacífico es hoy por hoy uno de los grandes motores de la Economía Mundial cuyo desarrollo data aproximadamente desde los años 60. En lo que refiere a Asia, salvo Japón, el resto de los países del área iniciaron su desarrollo en las oleadas del capitalismo mundial a partir de dicha década. Ello fue reubicando paulatinamente el centro geoeconómico del mundo desde el Atlántico hacia el Pacífico. Dada su importancia, en los últimos años se han dado diversas iniciativas comerciales en el área, tales como: El Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés); el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP, por sus siglas en inglés); la Asociación Económica Integral Regional (RCEP, por sus siglas en inglés); y la Alianza del Pacífico.

La APEC fue creada en 1989, en la actualidad está compuesta por 21 países, los cuales se reúnen anualmente desde 1993 en la Cumbre de Líderes. La finalidad de la APEC es promover el libre comercio a través de la región de Asia-Pacífico, para ello se está trabajando en la conformación del Área de Libre Comercio de Asia-Pacífico (ALCAP) en los próximos años. Es una organización de carácter voluntario, cuyas declaraciones son adoptadas en consenso y no vinculantes, representa alrededor del 40 por ciento de la población mundial, el 49 % del comercio mundial y entre el 54-57 por ciento del PIB global. Números que indican el gran impacto a escala global que tiene.

Este año la reunión se llevó a cabo entre el 12 y 18 de noviembre en Port Moresby, Papúa Nueva Guinea, bajo el lema: "Aprovechar las oportunidades de inclusión. Abrazar el futuro digital". Cuyos temas centrales fueron el contexto global y la integración económica regional. Desde luego la actual situación de guerra comercial entre Estados Unidos y China fue quien conquistó la escena. A tal punto que fue la primera vez que concluye la reunión anual sin Declaración final ya que no se llegó a un consenso entre China y los Estados Unidos.

En su discurso el vicepresidente Mike Pence, quien asistió en representación de Donald Trump, aprovechó para reiterar las denuncias que ha venido haciendo en los últimos meses el gobierno estadounidense en contra de China. Acusaciones en torno al robo de propiedad intelectual, transferencias de tecnología forzadas y las prácticas comerciales desleales. Esto último en una crítica frontal a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, acusan a China de promover inversión en infraestructuras y créditos blandos a países en desarrollo con el que tratarían de ganar influencia en la zona. Estados Unidos ha calificado la Iniciativa como "opaca diplomacia de chequera". "Al desarrollar proyectos que conllevan fuertes ataduras y conducen a una deuda abrumadora", en palabras de Mike Pence en su discurso en la cumbre. A lo cual sumó que la Iniciativa es un "cinturón de restricción" y un "camino de un solo sentido".

Por otra parte, en su intervención el presidente Xi Jinping se enfocó en desmontar tales denuncias, insistió que eran erróneas. Manifestó el Presidente que el plan de infraestructura de China es inclusivo y beneficioso: "No cerrará una puerta y creará un pequeño círculo [...] No es la llamada trampa, como dicen algunas personas. Es la avenida soleada donde China comparte oportunidades con el mundo para buscar el desarrollo común". Además, fue enfático en sentenciar que erigir barreras y romper vínculos comerciales van en contra de las leyes de la economía y de la historia, en alusión a las medidas impuestas por Trump.

El no consenso se da cuando China desaprueba que en la Declaración final incluya dentro de los acuerdos la frase "ir en contra de prácticas comerciales desleales". Palabras utilizadas por los funcionarios estadounidenses en sus discursos y declaraciones cuando se refieren a la Guerra Comercial. En este sentido, agencia noticiosas como AFP, o la corresponsal Jane Perlez, The New York Times, reseñaron un impasse diplomático en el cual aparentemente diplomáticos chinos habrían querido irrumpir en la Cancillería papú, situada en Puerto Moresby, para cambiar el texto, y supuestamente hayan tenido que acudir guardias de seguridad para impedirlo. Totalmente desmentido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de China.

Lo cierto es que las grandes potencias continuaran disputándose su influencia en el Pacífico. A la llegada del presidente Xi a Papúa Nueva Guinea, se inauguró una gran avenida financiada por el gigante asiático, la cual fue decorada, como un gesto de agradecimiento, con banderas de China e imágenes del Presidente. No obstante, Estados Unidos y sus socios en el área (Australia) avanzan en esa misma dirección: más "asistencia" para el desarrollo económico en la región, en las Islas del norte como Palau, Micronesia y las Islas Marshall. China por su parte cada vez se acerca a Fiji, Vanatu, Samoa, Micronesia, islas Cook, Tonga y Niue. En dicha confrontación geopolítica destacan temas que no podemos perder de vista, como el control de las Islas Manus, zona altamente geoestratégica, o las controversias en torno al Mar de China Meridional.

Las economías que forman parte del APEC son: 1) Australia; 2) Brunei; 3) Canadá; 4) Chile; 5) China; 6) Hong Kong; 7) Estados Unidos; 8) Indonesia; 9) Japón; 10) Corea; 11) Malasia; 12) México; 13) Nueva Zelanda; 14) Papúa Nueva Guinea; 15) Perú; 16) Filipinas; 17) Rusia; 18) Singapur; 19) Taiwán; 20) Tailandia; 21) Vietnam.