
Durante el período 1812–1814, apreciamos que nuestros patriotas hicieron múltiples esfuerzos por organizar dos gobiernos soberanos en Venezuela (el de la primera y el de la segunda República), ambos esfuerzos fueron frustrados por las tropas españolas y sus aliados criollos, dirigidas en primer lugar por Domingo Monteverde y luego por José Tomás Boves, Francisco Morales y Francisco Rosete, sin omitir la insurrección de los esclavizados negros, zambos y mulatos de Barlovento y el Litoral Central. Más adelante, en el trienio 1815–1818, el panorama de nuestra nación entra en una nueva fase en su lucha contra la hegemonía del imperio español, todo ello debido a la presencia en su territorio de un ejército traído directamente desde la Metrópoli (abril de 1815), el cual fue dirigido por el General Pablo Morillo, quien como Jefe Expedicionario, Gobernador y Capitán General de Venezuela logra entre otras cosas: internacionalizar el conflicto bélico, derrotar transitoriamente a los grupos insurgentes y ocasionar el destierro de varios oficiales del bando independentista, tal como ocurrió con Simón Bolívar quien se vio obligado a viajar a la Nueva Granada, luego a Jamaica y posteriormente a Haití, país donde obtiene en forma inmediata la ayuda del Presidente Alexandre Petión, la cual le permitió continuar la lucha en pro de la libertad de su país.
En una carta que el Libertador le envía al Presidente Petión, desde la ciudad de Kingston el 19 de diciembre de 1815, entre otras cosas, le manifiesta “...que nuestra afinidad de sentimientos en defensa de los derechos de nuestra patria común me granjeará por parte de V.E. los efectos de su inagotable benevolencia hacia todos aquellos que nunca recurrieron a ella en vano”. (Ver: Breviario del Libertador. Un esquema documental básico / notas y selección de Ramón de Zubiria. Medellín (Colombia): Editorial Bedout, 1983. p. 112). Catorce días después, es decir el 2 de enero de 1816, Bolívar conoció personalmente en la ciudad de Puerto Príncipe al Presidente Petión y entre los días 7 al 15 del mes antes mencionado, ambos personajes realizaron varias entrevistas y “...Bolívar recibió de Petión la promesa formal que le suministrará toda clase de auxilios para organizar y realizar una expedición contra la Costa Firme. También [Bolívar] se ha comprometido con Petión en proclamar la libertad general de los esclavos en Venezuela y en todos los territorios que liberte” (Véase: Verna, Paul. Bolívar y los emigrados patriotas en el Caribe (Trinidad, Curazao, San Thomas, Jamaica, Haití). Caracas: Instituto Nacional de Cooperación Educativa, INCE, 1983. p. 98).
Vemos que el Libertador, al obtener la ayuda prometida por Petión organiza la Expedición de los Cayos, la cual le permitió desembarcar en la isla de Margarita en el mes de mayo de 1816 y a partir de esa fecha, Bolívar inicia su campaña abolicionista, la cual estará acompañada desde el primer momento por la oposición que le manifiestan los sectores oligárquicos y los terratenientes –hacendados (amos de esclavos), quienes actuaron desde el mismo seno del Ejército Patriota y de las instituciones gubernamentales. Entre los decretos más importantes promulgados por Bolívar en pro de la abolición de la esclavitud, encontramos los siguientes: los emitidos el 2 de junio y el 16 de julio de 1816, el primero en Carúpano y el segundo en Ocumare de la Costa. En el decreto de Carúpano la libertad sólo beneficiaría a los esclavos que se incorporaran al servicio militar y en el de Ocumare de la Costa la liberación favorece a toda la población sometida a esclavitud.
Antes de finalizar el año de 1816, el Libertador permanece en el Oriente de nuestro país, y fue sometido a un conjunto de intrigas ocasionadas por los mismos oficiales patriotas y después de algunas derrotas en el campo militar, se vio obligado a salir de Venezuela, y otra vez viaja a Haití, donde se comunica con Petión, quien le otorga nuevamente una ayuda militar para que organizara otra expedición (Jacmel, 18 de diciembre de 1816) y entre otras cosas, Petión le manda una carta donde le dice “...Si la fortuna inconstante ha burlado por segunda vez las esperanzas de V.E., en la tercera puede serle favorable; yo al menos tengo ese presentimiento, y si yo puedo de algún modo disminuir la pena y sentimiento de V.E. puede desde luego contar con cuanto consuelo de mi depende” (Ver: Breviario del Libertador... p.109).
Después de la expedición antes mencionada, Bolívar y sus tropas pudieron consolidar un conjunto de triunfos en el campo militar que les garantizaron su permanencia en el Oriente y en el Sur de Venezuela. La amistad entre el Libertador y el Presidente Petión culminó con el fallecimiento de este último en 1818 y por tal motivo Bolívar expresó que Petión fue un hombre de grandes virtudes, patriotismo y generosidad. (“Carta de Simón Bolívar al Presidente Boyer” En: Breviario del Libertador...p. 111).
Dr. José Marcial Ramos Guédez.