Kumbh Mela: Festival hindú
El pasado 15 de enero del año en curso se dio inicio en la ciudad de Allahabad (ubicada al sur del estado de Uttar Pradesh en el norte de la India) el mayor festival de la peregrinación del hinduismo. Más de 120 millones de personas es el estimado de asistencia. Un evento de esta naturaleza prevé por partes de las autoridades del gobierno regional y nacional de la India una logística macro a nivel de alojamiento, alimentación, asistencia médica, transporte, baños públicos entre otros aspectos claves en las peculiaridades muy propias que exigen los asistentes a este encuentro. La confluencia de los ríos Ganges, Yamuna y Sarawsati son el centro de atención para llevar a cabo el ritual de purificación mediante un baño por parte de cada una de las personas.
Allahabad ya no es el nombre de esta ciudad, ahora se llama Prayagraj, ya que el anterior nombre era muy islámico para los sectores nacionalistas, especialmente el partido del gobierno nacional Bharatiya Janata (BJP) que procedió junto a sus líderes regionales a instaurar estos nuevos referentes en los nombres de estas ciudades y obviar la identidad histórica milenaria del lugar.
Uno de los principales promotores de esta medida es el Yogi Adityanath (autoridad equivalente a gobernador de la región y maestro religioso del hinduismo) radicalista por sus posiciones contrarias al reconocimiento de los derechos y deberes de otras minorías religiosas (musulmanes, cristianos entre otros) y obviamente cuenta con la anuencia del líder actual del BJP, Narendra Modi.
El festival Kumbh Mela 2019 está contaminado de nacionalismo, movimientos políticos electorales, radicalidad entre otros factores propios del momento político que vive India en la actualidad ante la proximidad de las elecciones entre abril y mayo del año en curso. Las gigantografías del primer ministro Modi colocadas en las áreas donde se lleva a cabo el acto sagrado de inmersión en los ríos mencionados a lo largo y ancho de los espacios del evento religioso por donde transitan los millones de devotos del hinduismo es una evidencia de ello.
Este festival va paralelo al desarrollo de la 106 edición del Indian Science Congress, donde algunos “expertos” en sus ponencias enuncian los avances científicos y tecnológicos del período vedanta (la llamada época de oro de la India antigua) con evidencias limitadas y a la vez cuestionan las teorías científicas occidentales de hombres tales como Albert Einstein e Isaac Newton entre otros. Sin embargo, avalan los llamados “descubrimientos científicos” en el campo gravitacional bajo la perspectiva hindú.
Poco a poco el proyecto político del BJP va monopolizando los espacios de la diversidad histórica y cultural que ha caracterizado a la India y se impone la dictadura política de una organización donde el nacionalismo manipula la religión para su beneficio. Así la democracia india no tendrá oxigenación, solo dogmas.
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